• Mon, Jul 2025

Una estrella en la noche oscura

Una estrella en la noche oscura

Una estrella en la noche oscura

Hoy primero de julio, el departamento de La Guajira cumple 60 años de existencia político-administrativa, contados a partir de la puesta en vigencia del acto legislativo No.1 del 28 de diciembre de 1964, dando el salto de intendencia nacional a calidad de departamento de la República, desligándose del colosal e histórico Magdalena Grande.

Una hermosa línea de tiempo colmada de hitos en el desarrollo económico, social y político, que han marcado huellas icónicas e indelebles en la memoria de su gente e instituciones.

Entre ellas, épocas difíciles como la noche oscura, que rompió el statu quo del umbral de paz en los social e incrementó la brecha de crecimiento y  desarrollo territorial: la Bonanza marimbera, en los años 1.974 a 1985. Pero coincidentemente,  en ese mismo periodo, surge otro punto de inflexión: la creación de la Universidad de La Guajira en 1976, mediante ordenanzas 011 y 012 emitidas por la Asamblea departamental. Pareciere una intervención divina y una luz en la oscuridad.

Desde ese momento, la universidad inició un periplo por no sucumbir en el intento y abrirse paso entre el caos y la desesperanza, batallando por la aceptación social, la credibilidad y la pertinencia de su fórmula misional: docencia, investigación y extensión; como elemento indispensable para la transformación y el desarrollo sostenible del territorio. Actitud tesonera y quijotesca, asumida desde su primer rector Alvaro Romero Effer, hasta nuestros días, con el ingeniero Carlos Arturo Robles Julio, creyendo firmemente, en la inmortalidad institucional y su capacidad transformadora hacia futuros deseados, de una Guajira mejor.

El advenimiento de la explotación de la mina de carbón a cielo abierto, segunda más grande de América, en el año 1982; marcó otro punto de referencia en nuestro territorio y develó la brecha formativa, en cantidad, calidad y pertinencia de nuestro talento humano para hacer frente al reto; mostrándonos lo alejado que estábamos en materia de competencia formativa y profesional, para pensar en una guajira productiva, emprendedora y competitiva. Cabe recordar para la época, frases como “Estamos sentados sobre una roca de oro y no nos hemos dado cuenta”, expresada por el economista Amilkar Acosta Medina, refiriéndose a las riquezas naturales y potencialidades del departamento.

Sin duda, esta realidad sirvió para poner los ojos en la formación técnica y profesional, como estrategia de cambio y desarrollo institucional. Se mejoró la credibilidad de la universidad en el entorno y la participación de sus miembros en organismos departamentales de coordinación, planificación y decisión; convirtiéndose, en nodo de articulación de la triada Universidad-Gobierno-Sociedad y asumiendo los desafíos de desarrollo departamental, como estrategias de ciencia, tecnología, innovación y formación pertinente, con los mismos.

Así las cosas, los últimos 25 años, han servido para consolidar una alianza estratégica de fortalecimiento de las dos instituciones: departamento y universidad; hacia un imaginario colectivo consciente en las demandas del presente y del futuro, con sus complejidades y transiciones, en la búsqueda de un departamento insertado desde sus potencialidades geoestratégicas, energéticas limpias, de dos océanos,  diversidad cultural y étnica, en la construcción, entre todos de una Guajira sostenible, emprendedora e igualitaria, de la mano de una universidad de calidad, inclusiva e innovadora.

Una feliz efeméride para nuestro querido departamento de La Guajira y su gente. ¡Viva La Guajira!

Diario La Guajira

Diario La Guajira

PromMarketing S.A.S